Te contamos qué medidas y cuidado debes tomar a la hora de usar ChatGPT aplicado a la educación
Muy lejos de augurios apocalípticos, donde todos somos reemplazados en nuestros trabajos por una Inteligencia Artificial (IA) y esclavizados por robots humanoides super inteligentes, la IA en general, y en particular ChatGPT, pueden ser de gran ayuda a la hora de simplificar tareas, planificar y encontrar ideas.
De todos modos, y como se suele decir, a la Inteligencia Artificial no debemos tenerle miedo, pero sí respeto. Que es lo mismo que decir que debemos utilizar ChatGPT y la IA con conciencia.
Es por eso que, en este artículo, te contamos qué medidas y cuidados debes tomar a la hora de usar ChatGPT aplicado a la educación.
Utilizar ChatGPT sin tener en cuenta la privacidad y la protección de datos
Estamos acostumbrados, desde hace años, a gozar de los beneficios que nos dan cientos y cientos de aplicaciones que, muchas veces, olvidamos cuál es el verdadero costo de utilizarlas. Por eso es muy importante conocer qué estamos dando a cambio al utilizar la IA y en especial ChatGPT.
Para saberlo, y como siempre, fuimos a la fuente y le preguntamos a ChatGPT qué garantías presenta OpenAI en resguardo de la privacidad y los datos de los usuarios de ChatGPT. ¿Qué datos recogen y almacenan? Y esto nos respondió:
“Datos de entrenamiento anónimos: OpenAI entrena a sus modelos de lenguaje, como ChatGPT, utilizando grandes conjuntos de datos que se recopilan de diversas fuentes en línea. Antes de utilizar estos datos, se realiza un proceso de anonimización para eliminar información personal identificable y proteger la privacidad de los individuos.
Política de retención de datos: OpenAI ha implementado una política de retención de datos que establece que los datos de usuario enviados a través de ChatGPT se eliminan después de 30 días. Esto asegura que los datos proporcionados por los usuarios no se conserven indefinidamente en sus sistemas.
No almacenamiento de identificadores: OpenAI ha afirmado que no almacena información que pueda ser utilizada para identificar a los usuarios individuales que interactúan con ChatGPT. Esto ayuda a preservar la privacidad de los usuarios y asegura que sus interacciones no estén vinculadas a su identidad personal.
Es importante tener en cuenta que las prácticas y garantías de OpenAI pueden estar sujetas a cambios y actualizaciones, ya que la compañía continúa mejorando sus servicios y políticas. Es recomendable revisar las políticas de privacidad y términos de servicio proporcionados por OpenAI para obtener la información más actualizada y detallada sobre cómo protegen los datos de los usuarios. Como usuario, siempre es esencial estar informado sobre cómo se manejan los datos y la privacidad en cualquier plataforma o servicio en línea.”
De todos modos, y según la política de privacidad que publica OpenAI, estos son los datos que almacenan:
Además de que ChatGPT recopila y almacena cada chat, se queda, por supuesto, con tus datos de registro, dirección IP, tipo de navegador y configuración, fecha y hora de conexión y hasta datos de cómo el usuario interactuó con la herramienta.
Esto también incluyen información exacta sobre la ubicación del usuario, zona horaria y país. Además de datos sobre el dispositivo utilizado, la versión del software, el sistema operativo y, por supuesto, información sobre navegador.
Es por eso que, como ya mencionamos, es importante tener todo esto en cuenta a la hora de utilizar ChatGPT, para hacerlo con conciencia para lograr un mejor y más seguro uso.
No depender de ChatGPT en particular, y de la IA en general
Hemos analizado en anteriores artículos los numerosos beneficios que tiene el uso de ChatGPT a la hora de aplicarlo al trabajo y al estudio, ya que es realmente efectivo a la hora de agilizar tareas, planificar, analizar y generar ideas, y muchas cosas más. Sin embargo, y por esta misma razón, el acostumbramiento a su uso puede adormecer nuestra iniciativa y creatividad. Agiliza, sí, pero no hace todo.
Es por eso que debemos complementar su uso con metodologías de enseñanza tradicional, apoyándonos en la interacción humana, en las tareas prácticas y en la contención emocional.
Por otro lado, y más allá de lo que refiere a nuestra propia creatividad e iniciativa, siempre es bueno contar con más de una fuente. Por eso, a la hora de apoyarnos en un asistente virtual, es pertinente contar con otros modelos de lenguaje de gran capacidad cognitiva como lo son Bard, Bing, Character AI, entre muchos otros.
Entender que la IA, y en particular ChatGPT, no son infalibles
Tan importante como conocer los beneficios que nos puede dar ChatGPT a la hora de aplicarlo en el aula, es conocer sus limitaciones. Esto nos marcará los límites y nos dará la pauta y la posibilidad para obtener otras fuentes y cotejar la información con criterio.
ChatGPT da mejores respuestas cuando se le da mejores órdenes. De lo contrario, puede ser errático, poco preciso, y hasta mentiroso. Es decir, cuando no sabe algo, lo inventa.
No perder el pensamiento crítico al utilizar Inteligencia Artificial
Debemos evitar depender exclusivamente de la IA para obtener respuestas sin cuestionarlas. Es fundamental fomentar el pensamiento crítico alentando a cuestionar, analizar y a evaluar la información proporcionada por la IA. El docente debe animar a los estudiantes a buscar diferentes fuentes, contrastar información y desarrollar su propio juicio y razonamiento.
No olvidar el contacto humano y el trabajo en equipo
La Inteligencia Artificial tiene la capacidad de personalizar en cada alumno la enseñanza y la evaluación. Puede adaptar el contenido a cada uno, trazando un plan, analizando y actuando en consecuencia.
Sin embargo, debajo de esto, subyace el peligro del aislamiento y el culto al individualismo. Es por eso que debemos fomentar la interacción humana y el trabajo en equipo, sin olvidar una eficiente administración de las emociones. Habilidades fundamentales a la hora de insertarse en el mundo laboral en particular y en la vida social en general.
Las tecnologías basadas en Inteligencia Artificial son una gran oportunidad y a la vez un desafío. Está en nuestras manos obtener de ellas el mayor provecho posible.
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